De nombre Repúblico de nacimiento, más tarde, obligados a cambiarle el nombre, le llamaron Miguel.
En el año 1936, de noche y a escondidas, mi marido salió de su pueblo con su madre y sus tres hermanos huyendo de la Guerra Civil Española. Viajaron en tren hasta Algeciras. Después en barco hacia Marruecos, pasaron por Ceuta y se refugiaron un año en Tetuán. Más tarde se instalaron en Tánger.
La madre de Miguel aparece con la cabeza rapada, pues era costumbre castigar y señalar así a las mujeres del bando republicano.
Dejaron atrás a su padre preso y condenado a muerte por “rojo”, el cual pasó diez años en prisión. Una vez fuera de la cárcel, lo mantuvieron confinado durante bastante tiempo en Punta Umbría (Huelva), de la que no podía salir.
No fue hasta 1961, que Miguel volvería a encontrarse con su padre. |